La cuarta revolución industrial ya está afectando a muchos aspectos de la economía mundial. Su impacto en las diferentes industrias está transformando los modelos de negocio y producción tal y como los conocíamos. La inteligencia artificial, la realidad aumentada, la robótica y el Big Data son puntos claves para entender este proceso de transformación irreversible. Pero ¿cómo afecta este cambio tecnológico a las ciudades?

La sostenibilidad de las ciudades emergentes

La industrialización suele traer consigo cambios positivos e innovadores. Los procesos se simplifican y la digitalización nos hace la vida más sencilla. No obstante, en este sentido siempre hay dos caras de la moneda. Los procesos de transformación tan profundos como el que está suponiendo la cuarta revolución industrial conllevan además una serie de retos que son necesarios de afrontar.

Los avances en nuevas tecnologías están cambiando el sistema y organización de las ciudades emergentes. Estamos ante una nueva civilización más inteligente en la que todo está conectado tecnológicamente. Estos cambios traen consigo una preocupación. La sostenibilidad de esta nueva forma de vida en la polis.

Es importante lograr que esta ya imparable cuarta revolución industrial sea respetuosa con el medio ambiente, así como con la eficiencia energética.

Cómo lograr ciudades más ecológicas

Si algo tiene el avance científico y tecnológico es la investigación y el estudio de nuevas alternativas ecológicas. Las ciudades emergentes estarán llenas de coches automáticos, drones, impresoras 3D, máquinas conectadas mediante el Internet de las cosas, etc. Esto supone la necesidad de reorientar la cuarta revolución industrial hacia nuevos modelos de energía más sostenibles y respetuosos con nuestro entorno.

Las nuevas ciudades emergentes necesitan del uso de las nuevas tecnologías para:

  • La creación de edificios inteligentes con materiales capaces de ahorrar energía, aprovechando mejor los recursos existentes.
  • Un sistema de trasporte que reduzca la contaminación en el aire.
  • La reducción del porcentaje de tráfico que actualmente se mueve día a día por las ciudades de todo el mundo.
  • La creación de espacios más abiertos y zonas verdes.
  • Industrias y empresas que basen su filosofía en el uso de energías limpias y renovables.

Conclusión

Estamos ante un verdadero reto industrial, empresarial y social del que todos formamos parte. A lo largo de todo este proceso evolutivo como es esta cuarta revolución industrial, es fundamental la participación de todos los sectores, con el fin de asegurar un cambio seguro y respetuoso con el medio ambiente. La sostenibilidad del progreso siempre ha sido el gran reto en la vida del ser humano.

Y es que, en definitiva, vivimos en un mundo que necesitamos para poder ser lo que somos y hacer lo que hacemos. Por este motivo, las industrias, empresas y nuevos modelos de ciudades han de saber hacer coexistir las nuevas tecnologías con un proceso cada vez menos contaminante y más sostenible para el medio ambiente. Estamos ante un proceso largo en el que aún tenemos tiempo de hacer las cosas bien. Con una buena gestión de los recursos aplicada sobre el concepto de economía circular, todos saldremos ganando.